Los cambios bruscos de peso, el embarazo y la lactancia pueden provocar una distensión del tejido del pecho que hace que la mama caiga, dejando el pecho laxo independientemente de su tamaño. Muchas mujeres, tienen el pecho caído aunque las mamas sean de tamaño proporcionado. La elevación de mama, también llamada pexia de mama, consiste en eliminar el tejido flácido del pecho y levantar la mama caída. Para ello y, dependiendo del estado de la mama, se realiza una incisión en forma de O, I, J ó T. Durante la intervención también se centra el pezón que, al igual que la mama, estaba caído.
En caso de que esté el pecho vacío además de caído, la paciente puede decidir someterse a un aumento mamario con prótesis de gel de silicona. Este procedimiento no conlleva ningún riesgo para su salud y proporcionará a la paciente un efecto estético muy satisfactorio y completo. En este caso, la paciente discutirá con su cirujano el volumen aproximado que tendrá el pecho, siempre teniendo en cuenta sus proporciones físicas.
La anestesia para la pexia de mama es anestesia general. Es necesario que el paciente ingreses durante 24 horas.
Es posible que, tras la intervención, desaparezca la sensibilidad del pecho de forma temporal. La paciente la irá recuperando paulatinamente.